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Publicado originalmente en Alternativa Española |
Navidad, natividad, nacimiento, ¿pero quién nace?. Dios hecho hombre, encarnado en el seno de una Virgen llamada María por obra del Espíritu Santo. El mismo Cristo histórico que daba luz a los ciegos, oído a los sordos, curaba a los paralíticos y resucitaba a los muertos.
Hoy en día puede que muchos no crean el dogma de Dios hecho hombre, ni siquiera en el Jesús histórico. Pero si nos es posible a todos creer en nuestras hermosas tradiciones.
Qué hermoso es que el día de la Noche Buena se reúnan las familias para cenar juntos. O cuando, sobre todo en el mundo rural, se iba cantando villancicos por las casas pidiendo el aguinaldo. Incluso se festejaba con los animales a los que esa Noche se les ponía doble ración, sobre todo a los que hacían las labores del campo.
Qué hermoso es ver la inocencia de nuestros niños en la festividad de los Reyes Magos, en memoria de aquellos sabios que, siguiendo a la estrella, acudieron a adorar al Niño nacido en Belén y entregarle sus regalos de incienso como Dios, oro como Rey y mirra como Hombre.
Respetemos nuestras tradiciones y no nos dejemos llevar por snobismos impuestos desde fuera. Amémoslas si no por su significado, al menos porque son nuestras.