jueves, 28 de enero de 2021

HAGAMOS ELOGIO DE LOS HOMBRES DE BIEN

Blas Piñar
 Ciertamente,cuando Blas Piñar hablaba del amor a la Patria enardecía los corazones; pero no solamente era un patriota (alguien, con acierto ha dicho que el último) sino que era también un místico. Hablaba de las cosas de abajo (inmanencia), mas también de las de arriba (trascendencia). ¡Y de qué manera! Sus discursos transidos de la más alta teología jamás escuchada. No en vano aseguró el obispo monseñor Guerra Campos, que Don Blas sabía más teología que todos los obispos juntos.

No era el politiquero de turno, parlanchín electoralista, que promete lo que sabe que no va a cumplir. Era el hombre que nos hablaba de Sistemas y Principios en los que debía sustentarse toda acción humana y política.

Profetizó lo que luego se haría triste realidad y que no fue otra cosa que los resultados de la aplicación de la funesta Constitución. Lo dijo por activa y por pasiva una y mil veces. Su boca no conoció la mentira ni perteneció a la asamblea de los cínicos.

¡Viva Cristo Rey! ¡Arriba España! ¡Adelante España!