Los nombres de estos heridos a navajazos, militantes de Fueza Nueva, son: Carlos Pericet Meléndez-Valdés (estudiante de derecho) y Juan Suárez Herrera (trabajador de hostelería).
Tal día como hoy pero de un 2 de diciembre de 1979, tuvo lugar la primera manifestación, en la ciudad de Córdoba, a favor del Estatuto de Autonomía de Andalucía; lo que llaman el día de la patria andaluza, así con minúsculas. La antiespaña, compuesta por comunistas, socialistas y culturetas intelectualoides que se apuntan a un bombardeo con tal de hacerse notar, decidió que la bandera de española no presidiese la cabecera de dicha manifestación.
La aparición del Estado de las Autonomías promovió, de prisa y corriendo, que cada una de ellas buscase afanosamente una bandera. Algunas de estas ya estaban reflejadas en el escudo nacional. Otras, como la andaluza provenía de los almohades y los benimerines que invadieron la península. La impronta que llevaban estas banderas era la del enfrentamiento con la española y a ello contribuyeron los partidos políticos de uno y otro signo del llamado arco constitucional.
Fuerza Nueva denunció la maniobra y su delegación en Córdoba intentó colocar la bandera de España en la cabecera de la manifestación, lo que pudo costarle la vida a varios de sus militantes. Las fotografías que mostramos lo dicen de manera elocuente.
El periódico “El País”, como es su estilo, mintió descaradamente, publicando estas imágenes pero diciendo que estos heridos a navajazos solo eran manifestantes pacíficos y que los autores de las cuchilladas habían sido los fuerzanovistas. La verdad, al revés. También publicaron que los autonomistas habían sido ametrallados por Fueza Nueva. Hay que ser hijos de Satanás para mentir desinformando de esta manera. Y al día de hoy lo siguen haciendo. Lo suyo es la mentira hecha costumbre.
Es un pequeño retazo histórico de cómo comenzó el Estatuto autonómico andaluz.
