martes, 4 de septiembre de 2018

"Que ninguna mujer vaya a la cárcel por abortar"

   De vez en cuando es necesario recordar que el aborto a petición sigue causando un espantoso pero oculto genocidio en los países en los que se han impuesto leyes para ello. Con todo el deterioro cultural, educativo, político, social, económico, espiritual y nacional que implica, amén de la pesada carga que ello acaba imponiendo sobre el resto de la población y sobre las generaciones futuras.

   Pero además, es que creemos que es bueno analizar la estafa sistemática y la mentira de algunos de los argumentos que se han venido esgrimiendo para apoyar o tolerar el aborto a petición (algunos de esos argumentos incluso asumidos por personas que se dicen del movimiento pro-vida) y de cómo siendo evidente la estafa no existe voluntad política alguna de volver a revisar tales engaños.

  Recordábamos cómo muchos partidarios del aborto e incluso supuestos providas trataban de explotar un lado buenista y sentimentaloide para tratar de eclipsar la justicia y la razón a lo que es en realidad un crimen vil y atroz con frases como "Que ninguna mujer vaya a la cárcel por abortar"... Como si con ello quisieran erigirse en defensores de la mujer al tiempo que desean evitar sufrimientos innecesarios. Y como si el aborto procurado no fuese mas que un mal opinable y abstracto.

   Pues bien, leyendo casos como éste, vemos cómo lamentablemente una vez impuestas las leyes del aborto, quienes sí son perseguidos, procesados y/o se les intenta meter a la cárcel son precisamente las personas de buena voluntad y a los verdaderos pro-vidas. ¿Dónde quedan ahora todos esos buenistas y sus reivindicaciones?

   Pero si quieren saber más, recomendamos el artículo publicado al respecto en abortono.org