viernes, 13 de octubre de 2017

CONSUMADA LA TRAICIÓN: DEPRESIÓN...

«Al suspender ante las cámaras lo que acababa de proclamar ante las mismas, y pedir -suplicar casi- “diálogo”, “mediación”, “entendimiento”, el taimado timador se ha convertido, por obra y gracia de tan mágicas palabras, en “el bueno” frente a “los malos” de Madrid» (El Manifiesto). Pero, luego y fuera del hemiciclo, han firmado rápidamente una declaración nítida de independencia, sin duda preparada de antemano, para consumo interno español; todo, incluidos los retrasos iniciales, perfectamente planificado. Y, ante eso, como en los vergonzosos episodios anteriores, recientes y añejos, la reacción del poder institucional ha sido nula, de calculada ineficacia.

La traición separatista y la traición de las Jefaturas del Estado y del Gobierno, más la de la Judicatura, las FAS, la "iglesia", los "partidos mayoritarios" y el capital (no traslada las sedes fiscales, apoya los medios de difusión traidores). Toda la cabeza del cuerpo español está podrida y difunde su veneno.

De lo poco que circula por la deprimida red, lo más destacable es: Masones, la mano que mece la cuna del secesionismo catalán, de Juan Robles, a pesar de que se "olvida" de los masones de Madrid y de quién impulsa esas sociedades secretas en el mundo (Actuall).

También tras el 98 la mayoría de los españoles vieron clara la mano de la masonería, aunque se quedaron muy cortos con su regeneracionismo (Javier Barraycoa, La Gaceta).

Conclusión: se palpa la depresión, como se impuso tras el Desastre del 98..., pero algo hay de positivo en este drama, el que muchos se van dando cuenta de que o se cambia todo lo que nos lleva al desastre o esa "cabeza" nos matará.

Ante esa tesitura todo se clarifica: o con España o contra España, o nos rendimos y colaboramos con los traidores o impulsamos una reacción popular de patriotismo que derribe el sistema perverso y perversor que nos lleva a la muerte.

¡Dios salve a España!

J.Mª. Manrique. (Juró Bandera e ingresó en el Ejército Nacional de España en 1968)